Plantilla de factura financiera

En el mundo de los negocios, existen muchas herramientas que ayudan a los empresarios a establecer un volumen de negocio y no interrumpir sus actividades. Estas herramientas incluyen facturación financiera. Con ellas, las empresas, especialmente las de nueva creación o las pequeñas, pueden obtener rápidamente la mayor parte del importe que les debe un cliente recurriendo a terceros. A continuación le explicamos qué es y cómo utilizarlo.

Un modelo de factura de servicio o productos se emite y se envía al cliente una vez finalizado el trabajo. Tras recibir el documento, el ordenante dispone de cierto tiempo (el plazo debe acordarse de antemano), durante el cual debe pagar. Tienen derecho a hacerlo incluso el último día. Durante todo este tiempo, tendrá que esperar. Sin embargo, en algunos casos, esto puede dar lugar a tiempos de inactividad en la producción. Si su empresa necesita este dinero de manera más inmediata, puede recurrir a servicios que ofrecen financiación de facturas.

En este caso, aparece un tercero en su relación con un cliente: una empresa de factoring o un proveedor de financiación. Este intermediario convierte los impagos en dinero real. El importe puede alcanzar hasta el 90% de la deuda principal, dependiendo del acuerdo. Normalmente, la factura estadounidense sigue estos pasos:

1. Completa una tarea y crea una plantilla de factura de asesor financiero, enviándola tanto al cliente como al proveedor de financiación.
2. Después, recibe el porcentaje acordado de la transacción en poco tiempo, lo que le permite seguir trabajando en otros proyectos.
3. Finalmente, sé deudor efectúa el pago en el plazo especificado. Esta cantidad va a la cuenta del proveedor y usted recibe el resto del dinero.

Por supuesto, los proveedores de financiación cobran por estos servicios. Sin embargo, a veces conseguir la mayor parte de la deuda rápidamente es más importante que los intereses devengados. En función de las características de su empresa, existen dos opciones para utilizar dichas facturas: el factoring y el descuento. En el primer caso, una empresa controlará el pago de un ordenante en lugar de usted. La segunda opción es más adecuada para las grandes empresas que pueden ejercer el control por sí mismas.